SOY DE...

SOY DE...

Es verdad, no se puede negar el placer que se logra al oír que alguien te considera suyo.
Y no hablo de objeto manipulable, sino de que alguien tiene la certeza de que es poseedor de parte de tu alma, parte de tu mente, parte de tu vida.
De mis viejos hombres lo que más añoro es el momento en que como la cosa más natural del mundo me llevaban a conocer a su gente, su otro mundo lejos del que compartía conmigo, y con el mayor de los orgullos decían "Ella es mi novia". ¡Qué alegría sentir el orgullo, la alegría en sus voces al hacer esa afirmación...! Tan simple, pero que tanto expresa.
Lo mismo sucede cuando en una plaza, tu amiga justo se encuentra con algún conocido y al momento en que te presenta dice "Esta es mi amiga..." ¡Qué alegría! Es un instante en que cruzan miradas y el brillo en ambos pares de ojos todo lo dice.
¿Qué tanto tiene de importante sentirse propiedad de alguien? Pienso que más que propiedad, lo que importa es sentirse "parte de", porque genera todas estas lindas sensaciones cuando es recíproco, y si es recíproco, significa que estamos compartiendo.
Si hablamos de compartir, hablamos de nuestra más grande individualidad, porque más allá de tener una relación explícita o no con otra persona, lo que de hecho alcancemos a compartir va a depender pura y exclusivamente de lo que queramos compartir. Va a depender de cómo mi individualidad baila con la tuya, y de cómo ambas generan un vínculo que va a ser único en cada relación.
Jamás van a existir dos vínculos iguales. Lo que sí pueden existir son sensaciones similares al apreciar las particularidades de cada uno de los vínculos.
Porque cualquiera puede ser "novia" o "amiga", pero ser "tu novia", o "tu amiga" para mí es de las cosas más importantes en esta vida.

21 de febrero de 2008

REFLEJOS DE M.

Hay decisiones difíciles de tomar, que por momentos me convencen de no significar nada y en otros, embarullan con millones de voces recriminatorias que me empujan hacia atrás. Y otra vez intentarlo, para saber que vuelvo al lugar donde partí, en un ciclo interminable.

No hay un momento adecuado, ni la hora exacta para hablar de las cosas a las que le damos un triste final. Pero urge la necesidad de cortar los hilos, más cuando el hilo desgastado nos hace pender inmóviles, arriesgando nuestras vidas.

Mis sentimientos son cada vez más efímeros, se vuelan con la intermitente respiración de un moribundo, son frágiles como los pétalos de un jazmín arrojado al vacío.

Y creyendo que algún día podré estar segura de atraparlos es que sigo transitando este camino de espinas, con la única esperanza de develar el misterio, de sentirme más humana, y aunque implique perder, que me obligue a decidir.

Reencontrarme con la soledad dentro de mí, con la insatisfacción de una vida inerte. Convencida de que nada sirve engañarse por la compañía de otros, la desesperación permanece latente, debajo del disfraz de la felicidad.

Un disfraz de sentimientos sintéticos, inciertos, juegan con mi credulidad, dañándome, y provocando el engaño en otros.

No quiero ser la víctima, quiero vencer buscando mi libertad.

Encontrar el final que determine el comienzo.

JOYAS EN EL BASURERO

amigos
gracias todos los que participaron en el inicio de CUENTOS Q CURAN
leimos el cuento "joyas en el basurero" de Juan Antonio Vallejo Nagera
abrimos este espacio para q puedan dejar sus mensajes, pensamientos, sentimientos,
como se sintieron ayer, q les parecio el cuento, que les dejo, etc
si alguien quiere leer el cuento y no accede al libro, por favor, mandenos un email
que se lo enviamos (celae@logoterapia.com.uy)
Les informaremos de la nueva fecha
Saludos
Alejandro y Marcela

SOBRE LOS CUENTOS QUE CURAN

AGRADECEMOS A HUGO MENDEZ ASIDUO ASISTENTE A LOS ENCUENTROS "CUENTOS QUE CURAN" QUIEN NOS ACERCO ESTA REFLEXION

¿Que es un cuento? Un pequeño trozo de historia.

¿Que es una historia? Una sucesión de hechos con algún sentido. No hacemos un cuento con una sucesión de hechos físicos. En un cuento hay siempre alguien, humano o no, a quién le suceden cosas, un quién que toma decisiones para algo o por algo.

La diferencia entre alguien y algo es que justamente un alguien es conciente de cosas que suceden (muchas o pocas) y que toma decisiones o por lo menos pretende tomarlas para influir en las cosas que suceden.

Según Frankl el ser humano es un ser en busca de sentido. Un ser que intenta descubrir que sentido tiene su vida o descubrir el sentido en algún lugar para ir tras él y llenar su vida de sentido.

Según esto todo ser humano trataría que su vida fuera una historia y no un suceder de hechos monótonos, rutinarios o mecánicos sin ningún fin o sin ningún valor.

Una historia supone un pasado, un presente y un futuro relacionados por un sentido.

Nosotros siempre vivimos el presente, aunque no lo queramos. Pero lo podemos vivir como un instante físico aislado similar a los anteriores y a los venideros, una monótona sucesión de segundos uno igual al otro.

O lo podemos vivir como un momento de una historia, una historia que estoy tratando de escribir. Estoy en mi presente, conciente de él pero este presente es un paso en un camino que me he trazado. Este momento tiene un sentido en la historia de mi vida.

Como una melodía. Una melodía siempre la disfruto en el presente pero no la puedo escuchar atendiendo solo al presente. Una melodía es una sucesión de notas. Las escucho una tras otra, pero para disfrutar de la melodía debo recordar la nota anterior y más disfruto si conozco la melodía y se la que va a venir. Si me olvido de la nota anterior y no se que nota vendrá no escucho una melodía sino notas aisladas.

Tenemos que tratar que nuestro presente contenga nuestro pasado y un futuro posible, aunque lo vaya cambiando. Puedo ensayar muchas melodías para mi vida. Sin olvidar que no somos solistas. Nuestras historias involucran a los demás y las de los demás a nosotros.

En un cuento el escritor inventa melodías, historias de vida. Quizás estos pequeños trozos de historia son intentos de encontrar sentidos posibles en nuestras vidas. Quizás por eso un cuento pueda curar. Nos puede enseñar como buscar sentidos, mostrarnos caminos posibles.

FRAGMENTO DE "EL ULTIMO ENCUENTRO" DE SANDOR MARAI

Pero en el fondo de tu alma habitaba una emoción convulsa,
un deseo constante, el deseo de ser diferente de lo que eras. Es la mayor tragedia con que el destino puede castigar a una persona. El deseo de ser diferentes de quienes somos: no puede latir otro deseo más doloroso en el corazón humano, porque la vida no se puede soportar de otra manera que sabiendo que nos conformamos con lo que significamos para nosotros mismos y para el mundo. Tenemos que conformarnos con loque somos, y ser conscientes de que a cambio de esta sabiduría no recibiremos ningún galardón de la vida: no nos pondrán ninguna condecoración por saber y aceptar que somos vanidosos, egoístas, calvos y tripudos; no,hemos de saber que por nada de eso recibiremos galardones ni condecoraciones. Tenemos que soportarlo,éste es el único secreto. Tenemos que soportar nuestro carácter y nuestro temperamento, ya que sus fallos,egoísmos y ansias no los podrán cambiar ni nuestras experiencias ni nuestra comprensión. Tenemos que soportar que nuestros deseos no siempre tengan repercusión en el mundo. Tenemos que soportar que las personas que amamos no siempre nos amen, o que no nos amen como nos gustaría. Tenemos que soportar las traiciones y las infidelidades, y lo más difícil de todo: que una persona en concreto sea superior a nosotros, por sus cualidades morales o intelectuales. Esto es lo que he y aprendido en setenta y cinco añosde vida, aquí, en medio de este bosque. Pero tú no has podido soportarlo —dice en voz baja.
EL ULTIMO ENCUENTRO, PAG 120 Ed. Salamandra